Se acerca más el día de la madre y conjuntamente harto comercial con momentos que recuerdan el gran esfuerzo que una madre hace diariamente por uno. Y hoy sólo pienso, no hay peor tristeza que ver llorar a tu mamá.
Mi familia no siempre ha sido unida y se caracteriza por los daños que se hacen mutuamente, y mi madre ha sido muy lastimada por ellos, y ayer todo me hizo recordarlo. Lloré, lloré demasiado porque no sé que hacer para que ella se pueda sentir mejor, para que ella lo pueda superar, para que ella lo pueda olvidar. Me sentí impotente y frustrada; quería gritar.
Ver llorar a mi mamá, y escucharla decir: "toda mi vida he sufrido, jamás he tenido un momento en que haya sido realmente feliz" es algo que, no sé como explicarlo, pero obviamente no se sintió bien. Lloré a su lado y la abracé fuertemente, le acaricié el pelito, y le dije que la quería y lo único que se me ocurrió: "la vida sigue mami, y vas a ver que algún día todo esto cambiará y seremos felices, ya verás". Creo que no la convencí mucho, pero fue lo mejor que pude hacer en ese momento... logré que se calmara y se sintiera tranquila un rato.
Estas son las cosas que sirven de cachetada. Desperté de mi estupidez, de sentirme mal por cosas sin importancia y sentido. Mi mamá esta conmigo, y la ayudaré a seguir adelante, siempre con la mirada fija, con la frente en alto, sin frenar ni caer, siempre a su lado =).
