Hoy no tuve ganas de despertarme, me sentí cansada.
Hoy no siento que sea la misma. Hace dos días me he enterado que tengo un quiste y un cálculo, y aunque me dicen que no son enfermedades graves, serían la excusa perfecta para morir. Hoy no quiero nada más de la vida, estoy cansada de respirar. Me siento asfixiada en un mundo que deja ya de atraerme: no quiero trabajar, no quiero estudiar, no quiero amores, no quiero nada. Tanta frustración y desesperación me hace llorar y lo hago, tengo ganas de gritar pero me contengo, sufro pero nadie sabe entenderme.